RAREZAS (2)

LA REALIDAD ES INEXPLICABLE, VIDA MÍA © Por Xabier Lizarraga Cruchaga — No. Me niego; me opongo rotundamente. —dijo, y salió de la habitación como sale el chorro de agua del grifo abierto: arrastrando consigo lo que estaba a su paso, incluso las miradas de Lisandro y Romualdo tropezaban con su arrebatada respuesta. ¿A qué se negaba, si nadie le había pretendido hacer cómplice de nada? Él era el que había llegado; no, no había llegado, había irrumpido… interrumpido una coreografía que se desarrollaba con suavidad y precisión . — Déjalo —susurró Lisandro ( parecería que no quería desdibujar sus bien delineados labios que tantos miraban con algo más que admiración )—. Ya se le pasará; él es así, impulsivo ( hubiera querido decir rotundo, pero no le vino la palabra a esos labios tan deseados por algunos de los que lo acompañaban ); es bastante impredecible, diría yo ( e intentó reir, sin conseguir más que una grotesca mueca ). Pero el que había sa...